🍦 Helado de Vainilla

Un helado simple y cremoso con sabor clásico y alto en proteínas

Este helado de vainilla tiene toda la suavidad de un postre clásico—con un giro nutritivo. Hecho con yogur de soja, proteína en polvo y frutos secos, es fácil de preparar y se congela en una delicia cremosa. Además, la goma xantana garantiza una textura estable y fácil de servir, sin necesidad de lácteos ni herramientas complicadas.

Utensilios de cocina

• Batidora de mano

• Recipiente con tapa apto para congelador

Ingredientes

• 3 cucharadas de yogur de soja

• 1 cacito (aprox. 25–30 g) de proteína en polvo (preferiblemente sabor vainilla)

• 3 frutos secos (por ejemplo, anacardos o almendras)

• 1/2 cucharadita de extracto de vainilla

• 1/2 cucharadita de goma xantana

• 2 cubitos de hielo

Preparación

1. Empieza con el hielo: Coloca los 2 cubitos de hielo en la batidora y tritura bien hasta obtener trozos pequeños.

2. Añade los demás ingredientes: Incorpora el yogur, la proteína en polvo, los frutos secos, la vainilla y la goma xantana.

3. Bate hasta que quede suave: Mezcla todo hasta obtener una textura cremosa y espesa.

4. Primera fase de enfriado: Vierte la mezcla en el recipiente y congela durante 30 minutos.

5. Remueve y vuelve a congelar: Saca del congelador, remueve con una cuchara para romper cristales de hielo, y vuelve a congelar durante 1 hora más.

Sugerencias para servir

• Espolvorea con canela o nibs de cacao

• Añade crema de frutos secos o compota de frutas

• Sirve en un bol frío o en cucurucho

Conservación

Guardar en el congelador hasta por 3 días. Si queda muy duro, dejar reposar unos minutos a temperatura ambiente antes de servir.

Este Helado de Vainilla es simple, suave y lleno de bondad—¡perfecto para un capricho congelado en cualquier momento!