🍉 Helado de Sandía

Un postre delicioso e hidratante que también es visualmente divertido

Este helado de sandía no solo es delicioso e hidratante—¡también es muy divertido de preparar y servir! Batido con yogur de soja y leche vegetal para más cremosidad, y estabilizado con goma xantana para una textura suave, se vierte de nuevo en la cáscara natural y se congela para convertirse en el postre tipo polo definitivo. Perfecto para fiestas veraniegas o para refrescarte en un día caluroso.

Utensilios de cocina

• Batidora de mano

• Bandeja (para congelar la cáscara)

Ingredientes

• 100 g de sandía (pulpa sin semillas)

• 120 ml de yogur de soja

• 10 ml de leche vegetal (almendra, avena o soja)

• 3 g de goma xantana

• Endulzante al gusto (opcional)

Preparación

1. Prepara la cáscara: Corta una rodaja gruesa de sandía y extrae cuidadosamente la pulpa sin dañar la cáscara. Colócala sobre una bandeja.

2. Quita las semillas: Retira todas las semillas de la pulpa de sandía y córtala en cubos.

3. Tritura la mezcla: Coloca la pulpa en la batidora junto con el yogur, la leche vegetal, la goma xantana y el endulzante. Mezcla hasta obtener una textura suave.

4. Monta el polo: Inserta palitos de madera en la cáscara (parcialmente dentro, parcialmente fuera).

5. Vierte y congela: Llena la cáscara vacía con la mezcla batida. Congela con cuidado.

6. Congela por completo: Deja congelar varias horas o durante toda la noche.

Sugerencias para servir

• Corta en segmentos para polos fáciles de coger

• Espolvorea con coco rallado o hojas de menta

• Rocía con jugo de lima para un toque ácido

Conservación

Guardar en el congelador hasta por 1 semana. Servir directamente desde el congelador.

Este Helado de Sandía es una forma creativa e hidratante de disfrutar la fruta—¡y también un postre llamativo!